Siempre creímos que sólo Dios sabe la hora de nuestra muerte. Ese disparate hace de Él un ser enigmático, caprichoso y refinadamente cruel ¿quién va a querer encontrarse con un ser así? El temor a Dios es el cuarto y último obstáculo para la paz. Desaloja la basura de tu mente si quieres encontrarlo, no lo harás si no lo conoces. Él no sabe nada de tu muerte ni de la vida de muerte que sueñas aparte. Él es completamente santo… y tú también.
PÍLDORAS PARA DESPERTAR Si crees que Dios fija las fechas de tu nacimiento y muerte ¿Qué más piensas de Él a escondidas?
