No puedes sino ser bendito, a gritos lo dice tu razón. Eres bendito por ser un Hijo de Dios ¿cómo podrías no serlo? Sin embargo, no vives así, andas agachado todo el tiempo recibiendo golpes, tu vida lo niega. Levántate y recuérdate que siempre eres bendito.
Eres un Hijo de Dios. Usa los percances de la vida para recordarlo, eres bendito siempre. JLM

gracias, Gracias