“Por encima de todo quiero ver las cosas de otra manera”. Un paso más sobre lo de ayer. Leo que se trata de hacer una serie de compromisos definitivos y aporta una novedad extraordinaria; “El que los cumplas o no en el futuro no es algo que nos concierna ahora. Si estás dispuesto a hacerlos ahora, habrás dado el primer paso en el proceso de cumplirlos”. Siempre me pide lo que fácilmente está a mi alcance. “Ves a tu alrededor una legión de objetos separados, lo cual significa que en realidad no ves nada”. -¿Cómo? Al haber sólo una materia en la creación: “La luz que veas en cualquiera de ellas será la misma luz que verás en todas ellas”. Realmente esto es diferente a todo y consecuente; sólo con ver correctamente un objeto, vería el resto.
En efecto, la lección de hoy es el compromiso de abandonar mis ideas preconcebidas aprendidas en el pasado a cerca de los objetos con los que me relaciono. Hoy preguntaré a cada cosa qué es, en lugar de decírselo. “Nadie cuestiona lo que ya ha definido”. Hoy parto de nuevo centrándome en una cosa en concreto: “Tiene algo que mostrarte; algo bello, puro y de infinito valor, repleto de felicidad y esperanza. Oculto tras todas las ideas que tienes acerca de ella se encuentra su verdadero propósito, el cual comparte con todo el universo”. Nadie lo diría. Me parece tan extraordinario que no sé si voy a ser capar de lograr tanto y leo; “…deja que su propósito te sea revelado, en lugar de imponerle tú tu propio dictamen”. Voy con ello. Seis sesiones de dos minutos me pide hoy, de nuevo con los objetos que me rodean. Por encima de todo quiero ver mi teléfono de otra manera. Y me complazco en reconocer que tal vez nunca lo vi como realmente es, y paso de objeto lentamente…
Joseluis
Gracias, gracias